Si has pasado recientemente por un injerto capilar —o estás valorando hacerlo— es muy probable que te hayan hablado del minoxidil y, con ello, hayan aparecido algunas dudas. ¿Debes usarlo? ¿Cuándo empezar? ¿Qué efectos tiene sobre los folículos injertados y sobre el resto del cabello? Y, sobre todo, ¿qué pasa si decides no tomarlo?
En este artículo te explicamos si es necesario y su impacto después de un injerto capilar en la evolución de tu cabello, con información contrastada basada en la experiencia clínica del Dr. Luciano Montini, especialista en medicina capilar y director médico de Clínica Keller.
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No es imprescindible para el éxito del implante, pero sí recomendable a largo plazo
Cuando hablamos de injertos capilares, es importante entender que el minoxidil no es imprescindible para el éxito del implante. Los folículos trasplantados tienen una resistencia genética a la caída y no necesitan del minoxidil para sobrevivir. Aun así, su uso puede ser beneficioso a largo plazo, sobre todo porque ayuda a conservar y engrosar el cabello nativo, es decir, el que ya existía antes del injerto.
En otras palabras, el minoxidil no actúa sobre el folículo injertado, pero sí tiene una función clara en mantener el resto del cabello, que muchas veces sigue debilitado por procesos de alopecia.
¿Cuándo es seguro empezar a usar minoxidil tras el injerto?
Si se emplea en formato tópico, lo recomendable es esperar entre 3 semanas y 1 mes tras la cirugía. La razón no tiene que ver con el folículo implantado, sino con el proceso de cicatrización de la piel. En este periodo inicial, el cuero cabelludo está más sensible y puede reaccionar con picor, eccema o enrojecimiento.
Respecto al minoxidil oral, su uso puede iniciarse a los pocos días del injerto, ya que no implica contacto directo con la piel y, por tanto, no interfiere con la cicatrización.
Actualmente, el minoxidil oral es la opción preferida por muchos médicos debido a la mayor adherencia de los pacientes al tratamiento. Basta con una pastilla al día, sin interferencias con el lavado del pelo ni problemas de absorción que sí pueden desarrollarse con la aplicación tópica del minoxidil.
¿Qué pasa si tengo irritación o descamación tras el injerto?
Cualquier señal de irritación cutánea —sea causada por el minoxidil o por el propio proceso postoperatorio— debe considerarse un motivo para suspender el uso de este fármaco, al menos temporalmente.
En este sentido, es importante diferenciar entre una irritación clínica y el efecto «shedding» que puede provocar el minoxidil. Se trata un tipo de efluvio telógeno que no tiene ninguna importancia clínica y que no es motivo de alarma para suspender el tratamiento.
¿El minoxidil ayuda a prevenir el “shock loss”?
Si hablamos de pérdidas de cabello repentinas tras el injerto capilar, el “shock loss” suele ser el protagonista de las dudas de nuestros pacientes. Algunas de ellas se dirigen a consultar si el minoxidil puede ayudar a reducir las posibilidades de sufrir esta caída temporal del cabello tras el primer mes posoperatorio.
Lo cierto es que, aunque se ha planteado que el minoxidil podría ayudar a mitigar esta fase, no hay evidencia concluyente que lo confirme, ya que el shock loss es, por definición, un proceso reversible y temporal. Es más, su uso suele recomendarse una vez iniciado este proceso y no como medida preventiva.
Conclusiones sobre el uso del minoxidil después del injerto
La respuesta médica es clara: no es obligatorio, pero sí muy recomendable. La clave es entender que el tratamiento con minoxidil no está limitado al periodo postoperatorio, sino que debe considerarse como parte de una estrategia a largo plazo para preservar el cabello nativo. Dejar de usar minoxidil tras unos meses no afectará a los folículos injertados, pero sí puede acelerar el proceso de afinamiento y caída del cabello original que aún se conserva.
Además, lo ideal es combinarlo con otros tratamientos que aborden la causa concreta de la alopecia. Por ejemplo, finasteride o dutasteride para la alopecia androgenética. En cualquier caso, siempre deberás seguir las pautas de profesionales en medicina capilar, como el Dr. Luciano Montini o el resto del equipo médico de Clínica Keller. Logra el cabello que deseas con la guía adecuada.
