Cuando comienzas a perder el cabello es una suerte saber que puedes ser un candidato o candidata para someterte a una cirugía de recuperación de cabello. La buena noticia es que en una gran mayoría de casos es posible realizar esta intervención, sin embargo, desafortunadamente en un pequeño porcentaje algunos pacientes no pueden someterse a este tipo de cirugías. ¡Te lo mostramos!
Descubre tu tipo de alopecia
¿Sabías que no todas las alopecias son iguales? De forma reconocida existen seis tipos de alopecia que se manifiestan de diferentes formas y en diferentes grados, algunas causan parches, otras provocan la pérdida completa del pelo en la cabeza e incluso del vello corporal.
- Androgenética: Es la más común entre los hombres (un 60 % la padecerán), frente a las mujeres (quienes solo la sufrirán en un 25 %). Este tipo de alopecia causa una caída del cabello lenta y progresiva, es una de las más comunes y en la gran mayoría de casos sí puede tratarse con un implante capilar.
- Areata: La alopecia areata es una enfermedad autoinmune que provoca la caída del cabello y que resulta frecuente en la etapa infantil y adulta. En la mayoría de los casos, esta no es una alopecia tratable ya que la enfermedad autoinmune puede provocar la caída del pelo trasplantado.
- Fibrosante: Es un tipo de alopecia cicatricial (igual que sucede con la areata) que provoca la caída del pelo en la línea frontal del cuero cabelludo. Este tipo de alopecia es frecuente entre las mujeres a partir de la menopausia, pero también puede estar causada por alteraciones hormonales o genéticas, entre otros factores. En estos casos, es posible recurrir al trasplante capilar siempre que el proceso se haya estabilizado medicamente. Sin embargo, resulta esencial el seguimiento y el tratamiento médico para favorecer la supervivencia de los microinjertos.
- Cicatricial: La alopecia cicatricial surge debido a una enfermedad del cuero cabelludo, o bien por la pérdida de pelo debido a traumatismos, quemaduras o lesiones. En estas situaciones el cabello no crece en las zonas donde existe una cicatriz y solo el equipo médico de Keller Hair Center podrá indicarnos si es posible realizar un injerto.
- Universal: La alopecia universal se caracteriza porque el paciente pierde completamente el cuero cabelludo y el vello del cuerpo. Es una forma avanzada de alopecia areata.
Tu historial médico también es esencial para realizar un diagnóstico
Existen situaciones en las que un implante capilar, por sí solo, no puede frenar el problema de la calvicie. Por poner un ejemplo, si el paciente sufre tricotilomanía (un trastorno de la conducta que provoca a quien la padece la necesidad de arrancarse el cabello) es necesario superar la afección psicológica para iniciar el tratamiento con las mejores garantías. Solo en algunos casos será posible iniciarlo junto a terapia psicológica para conseguir unos resultados duraderos y un cuero cabelludo saludable.
Criterios de evaluación
- La estabilidad de tu alopecia. Algo que en muchas ocasiones viene marcado por la edad.
- El motivo de la calvicie: para descubrir si tiene un origen psicológico, causado por el estrés, una alimentación deficiente, etc. El injerto capilar no puede parchear un problema de fondo.
- La calidad de tu cuero cabelludo. Es imprescindible contar con las unidades foliculares necesarias para cubrir la zona con alopecia y llegar, así, a diseñar la imagen que deseamos.
La importancia del diagnóstico
Como vemos, la consulta previa con el equipo de cirujanos de Clínica Keller es imprescindible para conocer si eres un candidato o candidata a este tratamiento. La primera consulta es totalmente gratuita, por lo que te animamos a que contactes con nosotros y descubras si puedes someterte a esta intervención. ¡Te esperamos!
